Patologías

El término de necesidades educativas especiales hace referencia a aquellos alumnos que a largo de su escolaridad, y especialmente en las etapas en las que los aprendizajes se van haciendo progresivamente más complejos (como ocurre el la E.S.O., por ejemplo), encontrarán mayores dificultades para alcanzar los objetivos y contenidos planificados en el currículo ordinario y, por lo tanto, necesitarán de medidas de atención específicas a sus características y necesidades. Algunos de ellos pueden necesitar unos recursos materiales o humanos distintos de la mayoría, otros requerirán cambios nucleares en el currículo, por lo que habrá que diseñar actuaciones específicas con ellos (adaptaciones curriculares significativas).

Dentro de esta concepción adquiere un papel fundamental el diagnóstico, el conocimiento lo más exacto posible de las características, potencialidades y necesidades educativas de cada alumno, lo que nos permitirá conocer adecuadamente sus dificultades de aprendizaje y con ello podremos planificar la respuesta educativa más acorde para cada caso, aspecto esencial de esta nueva concepción es que el acento se pone en la capacidad del centro educativo para planificar, desarrollar y evaluar esa respuesta educativa específica para cada alumno; es decir, la capacidad para planificar y atender la atención a la diversidad. Esto supone reconocer que todos los alumnos tienen necesidades educativas, siendo éstas coincidentes en muchos casos, pero también distintas en otros. Por lo tanto, los distintos alumnos coincidentes en muchos casos, pero también distintas en otros. Por lo tanto, los distintos alumnos progresan en sus aprendizajes con ritmos distintos, con estrategias distintas y con dificultades diferentes, mayores o menores. El afrontamiento de esta realidad supone para los centros educativos la planificación del desarrollo curricular con distintos niveles de concreción, partiendo de la generalidad del centro hasta llegar a alumnos concretos con necesidades educativas especiales. Desde el proyecto educativo de centro, pasando por los correspondientes proyectos curriculares de etapa y las programaciones didácticas, el último paso será la adaptación curricular individual, recogida a través del documento correspondiente (D.I.A.C.).

Este concepto de necesidades educativas especiales destaca por ser un término estrictamente educativo.

A continuación, presentaré las diferentes deficiencias de un modo breve, recogiendo así los aspectos principales de cada una de ellas:

Deficiencia mental

Deficiencia visual

Deficiencia auditiva

Deficiencia motórica

Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH)

♦ Trastornos generalizados del desarrollo (TGD)

Alumnos con altas capacidades